"A lo madrileño, comiéndose las sílabas”

Chicote y Pedro Olmedo, han llevado la tradición culinaria de la ciudad a nuevas alturas, concretamente hasta la planta quinta del número 10 de la emblemática Puerta del Sol. Su ambicioso proyecto es una neotaberna que tiene como principal misión preservar y celebrar los sabores madrileños de toda la vida.

En este rincón gastronómico, el encanto de Madrid se fusiona con una visión moderna y creativa de la cocina, ofreciendo a los comensales una experiencia única. La elección de ubicar esta neotaberna en pleno corazón de la ciudad no es casualidad; la Puerta del Sol es un lugar emblemático y simbólico que conecta con la esencia madrileña, y Chicote y Olmedo han decidido aprovechar su posición para rendir homenaje a la rica tradición culinaria de la región.

En cada plato servido en este encantador establecimiento, se puede saborear la pasión y el respeto por la cocina madrileña. Los ingredientes locales de calidad se combinan con técnicas culinarias innovadoras, creando así una experiencia culinaria que deleita tanto a lugareños como a visitantes. Desde platos tradicionales como el cocido madrileño hasta creaciones contemporáneas que sorprenden con sabores y presentaciones únicas, la neotaberna se convierte en un lugar donde los comensales pueden explorar la evolución de la gastronomía de Madrid a lo largo de los años.